28 septiembre 2008

Aurora: Dioses y Monstruos

Diseño de Martin DeSoto

Con Aurora buscábamos un paso adelante. Y tal vez lo hayamos dado. Pero toda evolución tiene su precio. Y en el caso de Aurora el coste no es pequeño, que digamos. Durante todo el fin de semana pasado me acordé del monolito de 2001: una odisea en el espacio.

En un rodaje plagado de reveses, me sentí perdido en más de una ocasión (reconozco no estar muy habituado a improvisar), pero por suerte hemos contado con un reparto que ha sumado todo el rato y que ha aportado generosamente su experiencia para suplir algunas de nuestras carencias y aguantar el chaparrón en los momentos difíciles.

He tenido, estes días pasados, ocasión de visionar todo lo grabado y lo cierto es que al principio no alcanzaba a entender cómo pudo ser un rodaje tan duro. El aspecto de las imágenes es formidable y los actores están a unos niveles de realidad que a vosotros os emocionarán y que a mí me llenan de orgullo.

Hemos aprendido mucho de los aciertos y (sobre todo) de los errores. En ese sentido, muy a mi pesar, tengo que destacar la lección de profesionalidad que nos dió a todos Xosé Manuel Olveira "Pico" y que dejó al descubierto que a pesar de nuestra apuesta por un giro hacia lo profesional (si cabe incluso en la buena dirección), seguimos siendo unos novatos. Mis más sinceras disculpas, amigo.

Ahora nos queda confirmar, gracias al montaje, que tenemos una buena película y armar todo con un buen sonido y banda sonora. Como me dijo un amigo al que le confesaba el día anterior al rodaje que el cámara es en realidad mis ojos y por lo tanto una pieza fundamental para contar nuestra historia: "Cuida bien tu vista, pero no descuides el oído." Seguiremos su consejo.

08 septiembre 2008

La P con la A: PA

Mis más sentidas disculpas por la larga ausencia en el blog, pero creo que está más que justificada. Estamos a dos semanas del rodaje de Aurora y no tengo tiempo ni para hacer balance. Ahora mismo estamos en ese punto de la espiral en el que hai que agarrarse fuerte para no salir volando.

Así a todo sería muy mal padre si en el día más importante del año no hago un alto en nuestra vertiginosa carrera cara la grabación, para decir que mi pequeñaja ha aprendido a decir: Pa-pa.

Y para ella va dedicada esta entrada (y si todo sale bien el cortometraje también). Te quiero, Aldara.